domingo, 8 de mayo de 2011

NO, NO SON COSAS DE LA EDAD...

   Ya no existe el romanticismo, ya no existe…voy esbozando  un dibujo imaginario de mi misma, lo esbozo y observo que los primeros trazos de mi  obra (porque es una obra al fin y al cabo), son los mismos de un tiempo (largo) a esta parte, y que soy incapaz de cambiar esos primeros trazos…por lo visto deben ser unos malos trazos, porque  el resultado final del dibujo, no me sigue convenciendo del todo, siempre hay algo que no me gusta, algo que falla pero no consigo encontrar el punto concreto, me pierdo  entre trazo y trazo…y ya pierdo el sentido final y ya no sé si es que tiene algún sentido…Debes contenerte, me aconsejan los demás, y es que no sé hacerlo y cuando lo hago me entra un dolor estomacal, como una angustia vital, una necrosis estomacal, hasta que siento que no tengo estómago y siento un profundo  agujero negro y sin sentido en el centro mismo de mi cuerpo…y es que no hay nada peor que saber que algo de lo que vas a  hacer lo va estropear todo y no poder evitar hacerlo, dime qué cojones tengo que hacer para no cagarla…Y volviendo al tema romántico, si me gusta, me gusta que me digan  lo guapa (sea o no cierto) que soy,  lo bien que beso o que me pidan un abrazo para no soltarme jamás y las muestras de afecto en público y las fotos de besos apasionados, me gustan y al que le joda que baile…
  Hoy me voy a poner a los Stooges porque ni soy original ni quiero serlo, porque me ayudan a no pensar, porque me gustan las flores y que me hagan de cenar, porque me cago en la no existencia del romanticismo…porque I wanna be your dog pero tu es que eres más de gatos…y ya que me pongo y aprovechando que no tengo (nunca)  un orden lógico escribiendo, porque adoro el caos y blablablá…aprovecho para decir que no soporto las modas borreguiles (si es que hay alguna que no lo sea) ya que observé hace poco con miedo y asco en Las Vegas, como las niñas modernas (muy monas y delgadas todas ellas eso sí…) llevaban una cintita fina en la cabeza a modo de hippy años 60, embarradas en el puto Woodstock me gustaría a mi veros niñas de papá borderlines…
   Ah también me gusta que me regalen libros con alguna dedicatoria hortera…¿no es precioso? Yo creo que si.

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